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Presentación

Era impresionante el hecho de pararse a contemplar las tres papeleras que teníamos en clase al final cada jornada laboral. Papel, coronada por un cartel azul con dibujos explicativos; orgánico, con otro cartel, pero en gris; y finalmente plástico, con un cartel en la misma línea, pero de color amarillo.

• La papelera de papel tenía en muchas ocasiones papeles con una cara usada y la otra completamente en blanco, primer elemento a mejorar.
• La papelera de orgánico no sólo estaba medio vacía, sino que incluso, a veces, tenía residuos que no correspondían. Segundo elemento para corregir.
• La papelera de plástico era impactante: rebosante a diario, no había quien contuviera tantos envoltorios y tetrabriks.

A finales de mayo, nació la idea que daría lugar al reto que nos acompañaría en el mes de junio.

Nos situamos en tercero de Primaria, con dos de las cuatro clases. Cuarenta y dos alumnos en total que se comprometieron a conseguir una serie de retos progresivos que les llevarían a la consecución de un reto final el 16 de junio: máximo dos residuos en ambas clases.

Desarrollo

Antes de exponer todo el desarrollo de la experiencia didáctica, vamos a mencionar la temporalización, los objetivos, contenidos, metodología, recursos y herramientas de EducaMadrid utilizadas.

Temporalización

Se trata de un reto que situaríamos entre el 1 y el 16 de junio. El registro de datos se realizará a diario, aunque sólo contabilizarán 7 de esos días.

Objetivos

Los objetivos que nos propusimos fueron:

• Reflexionar sobre nuestros conocimientos previos sobre el tema de la contaminación y la salud.
• Analizar tipos de residuos que podemos generar en el aula.
• Clasificar los residuos de acuerdo con su acción contaminante.
• Establecer una relación entre el efecto contaminante de un residuo y su calidad nutritiva.
• Proponer una serie de retos progresivos para reducir los residuos en el aula.
• Trabajar en equipo para la consecución de los retos propuestos.

Contenidos

Los contenidos a trabajar han sido:

1. La contaminación.
2. Los alimentos saludables y no saludables.

Si lo relacionamos con los ODS (Objetivos de Desarrollo Sostenible) trabajados, podemos mencionar los siguientes:

3. Salud y bienestar.

4. Educación de calidad.

12. Producción y consumo responsable.

13. Acción por el clima.

Metodología

La metodología que usamos ha sido totalmente activa, cooperativa y basada en retos. Hemos usado nuevas tecnologías y los alumnos han sido protagonistas de su propio aprendizaje.

Recursos y herramientas

Los recursos que hemos usado han sido tecnológicos, pues cada alumno usaba una tableta para rellenar a diario un formulario sobre los residuos que había generado ese día.

Las herramientas que hemos utilizado han sido dos: el Aula Virtual y la herramienta de Formularios, ambas de EducaMadrid.

Análisis del problema

Antes de la elaboración de estos retos, llevamos a cabo un análisis de los conocimientos que teníamos hasta ahora tanto de residuos como de alimentación, considerando la relación entre estos dos temas.

Lo primero que hicimos fue analizar qué tipo de residuos podríamos generar en el aula: orgánico, con restos de fruta, principalmente; papel, con servilletas y envoltorios de comida; y finalmente plástico, compuesto por los envases, envoltorios y tetrabriks.

Tras esta clasificación, estuvimos organizando estos tres residuos respecto a su acción contaminante, ordenándolos de menor a mayor de este modo: plástico, papel y orgánico.

Tras este análisis y un posterior debate llegamos a la conclusión de que cuanto más contaminante era residuo menor era la calidad del desayuno de media mañana que tomábamos. El alumnado que traía un sándwich en un túper o fruta comprendía que su desayuno era mucho más saludable que el del alumno que traía un paquete de galletas y un zumo en un tetrabrik.

Elaboración del plan de acción mediante retos

Una vez todos estuvimos de acuerdo en que debíamos tener en consideración toda esta información, nos animamos a crear una planificación de siete retos consecutivos y progresivos que darían lugar a una reducción progresiva pero notable de los residuos que generábamos en clase. Presentamos estos a continuación:

OBJETIVO 1: durante los días 5 y 6 de junio. En cada día debíamos conseguir que hubiera, como máximo, 42 residuos de plástico o papel sumando las papeleras de las dos clases. Esto sería un residuo de plástico o papel máximo por alumno.

OBJETIVO 2: durante los días 8 y 9 de junio. En cada día debíamos conseguir que hubiera, como máximo, 25 residuos de plástico o papel sumando las papeleras de las dos clases. Esto significa que habríamos disminuido los residuos de plástico o papel casi a la mitad.

OBJETIVO 3: durante los días 13 y14 de junio. En cada día debíamos conseguir que hubiera, como máximo, 10 residuos de plástico o papel sumando las papeleras de las dos clases. Esto supone que habríamos disminuido los residuos de plástico o papel a menos de un cuarto del reto con el que comenzamos.

OBJETIVO FINAL: el día 16 de junio debíamos conseguir que hubiera, como máximo, 2 residuos de plástico o papel sumando las papeleras de las dos clases. Esto paso era emocionante, un logro en toda regla. Los días anteriores los nervios y la emoción recorrían las dos clases y era maravilloso ver su entusiasmo e ilusión por la consecución de este reto. Muchos aseguraban que lo iban a conseguir mientras otros proponían ideas para lograrlo por todos los medios. La ilusión llenaba las dos aulas.

Resultados obtenidos

Como hemos dicho anteriormente, no sólo hacíamos los formularios a diario, sino que lo registrábamos todo en el Aula Virtual. Como se puede observar, poníamos el día subrayado del color del cartel inicial el código QR, el enlace al formulario de EducaMadrid y, finalmente, captura de pantalla del gráfico con los resultados. Añadimos unas imágenes que ilustran el seguimiento que hicimos.